El mandala de esta semana se llama «El desapego» y pertenece a la coleccion «Mandalas para acompañar la sanación».
El texto que le acompaña es el siguiente:
«Por desear que la vida sea de otra manera, he alimentado lo que me molestaba en detrimiento de mi paz interior. Entro en el mandala por el centro y me concentro en mi dibujo. Coloreo todas las formas y me aplico en detallar las más pequeñas, lo que me permite llegar a todos los rincones de mi ser. Practico el desapego en relacion con lo que no puedo cambiar. Me entrego.»
Estos han sido dias bastante dificiles. Algunas veces siento como si la herida que tengo en relacion a la familia se abriese una y otra vez, como si una y otra vez yo tuviese que marcar y defender mi territorio, y termino entrando en un bucle donde estoy constantemente a la defensiva, constantemente sintiendome juzgada, constantemente teniendo que poner limites, sobretodo en lo que se refiere a como educar a mi hija.
No puedo mentir ni puedo engañarme, es algo que me molesta soberanamente. En mi cabeza pienso que cuando yo decido una cosa en relacion a su educacion, lo decidido deberia ser aceptado y no estar siempre volviendo al punto de inicio.
Hay momentos que me siento muy sola en esa situacion, y todo eso me quita una energia tremenda. Esta semana, una vez mas, mi voz y mi garganta fueron afectadas por ello.
Hoy me doy cuenta de cuanto necesito desapegarme de esa situacion. Me quita demasiada energia el estar constantemente luchando y poniendo limites. Me quita demasiada energia el estar explicando una y otra vez porque hago las cosas de una forma u otra. Me quita la paz, y salgo de mi centro, y no puedo seguir asi.
Lo suelto. Me entrego. Si quiero que mi verdadero Ser salga a brillar en el mundo ya no puedo seguir luchando contra lo que no puedo cambiar, ya no puedo seguir perdiendo energia vital para mi…
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