La Eudialita este mes me enseñó a ser más amable conmigo misma, a no juzgarme tan duro, a tomarme mis tiempos y a empezar a ver, aceptar y amar esa sombra que tanto rechazo... ¿Y tú? ¿También eres tú mayor carcelero? Este mes fue la primera vez que usé este cristal. La verdad es que no lo conocía, y puedo decir que la experiencia fue impresionante. La eudialita me calentó el corazón, me enseñó a ser mas amable y compasiva, sobretodo conmigo misma, me enseño a darme ese amor y cariño que doy a los demás...